domingo, 21 de septiembre de 2014

Poner el huevo

Con las vistas castellanas, de mesetas y tejados, antenas y gatos,
sentada en sofá maestro del relax,
tratando de poner en claridad, los pensamientos que alteran emociones, dándo subidones y bajones,
entiendo que hay una inquietud permanente en mí,
sin huevo que poner más queriendo poner huevo,
enumerando prioridades, para el renacer de este nuevo ser,
que quiere acompañarme en la soltería, que no soledad, de la vida!

Con cautela y mimo, haciendo camino!
Hoy entrantes de nuevo en mi hogar, con inocencia voladora pero aguijada... ayer te saqué y al salir el sol de hoy, esperabas en la puerta el momento de volver... y así lo hiciste pero por más que te decía que te fueras, tú cabezota de rayas seguias ahí. No podía irme y dejarte y me supo mal eliminarte.... tan mal que mis lágrimas cayeron y aún pasado el tiempo, culpable me siento por tan indiscriminado suceso.
Lo siento!
Como podría ponerle remedio?  ....
Y porqué tanto sufrimiento por el ser vivo?
Por el reino animal?
Por el vegetal?