miércoles, 18 de mayo de 2011

Metáfora de la vida


Era se una vez una niña que con toda su "ilusión" , los regalos navideños recibía con pasión.
Ella como todos los niños escribía su carta contando lo buena que ese año había sido.
Cuando llegaba el momento de recibir los regalos su estómago se encogía de nervios, ella deseosa de abrirlos se imaginaba jugando con ellos.
Llegó el momento de recibir los regalos y para su sorpresa, eran tarados, .... siempre había algo roto, algo que ella tenía que aceptar, pues no se podía cambiar, y aceptando comenzaba a jugar.
Durante años siempre le pasaba lo mismo, ella veía que sus juguetes estaban rotos y tenía que aceptar, ella aceptaba, más no era con lo que quería jugar.

Pues bien esa niña se convirtió en mujer y la vida seguía dándole sueños rotos, sueños en los que aprendía "aceptar" pues lo perfecto aún está por llegar.
Y así está esa mujer viviendo en un "aceptar" aquello que no ha pedido pero que se le ha dado para su "despertar".
De todo sale algo bueno y se puede aprovechar más ella desea que algún día su sueño se haga realidad.
Caminando mientras tanto con sus juguetes algo tarados, sacándo el mayor de los beneficios y paso a paso llegando al lugar deseado.
Así es la vida se dijo un día, nada es como uno sueña, la vida es aceptar y con ello madurar.
Aceptando con amor es la solución.
Feliz caminar a todos aquellos que cada día han de "aceptar" pues eso nos hace grandes en este despertar.
y por favor, no dejéis de SOÑAR!
Un abrazo almas!

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